Refugio Último

Hay lugares a los que no se llega caminando.
Se llega, parando, volviendo a sentir.
Este refugio es uno de ellos.

Durante nueve días recorrerás un camino suave y profundo:
un viaje de reconexión con tu cuerpo, con tus emociones y lo que hay presente en ti. De vuelta a sentir ese pulso interno que siempre te ha estado esperando.

Nada que lograr.
Solo aprender a regresar.
Una práctica de presencia, compasión y escucha.

[Día 1 - Refugio Último]
Volver al ahora a través de los sentidos es recordar que el cuerpo es refugio. Habitarlo es un acto de soberanía: la base desde la que todo puede sentirse y sostenerse.

[Día 2 - Refugio Último]
El cuerpo en alerta se acostumbra a la tensión y al control. Y olvida cómo se siente el alivio, la belleza, la ternura. No se trata de negar lo difícil, sino de abrir espacio a todo lo que también sostiene.

[Día 3 - Refugio Último]
Movernos dentro del cuerpo sin perdernos en los extremos: ni en el dolor ni en el placer. A través de esta danza consciente, el sistema nervioso reaprende el ritmo natural de expansión y reposo.

[Día 4 - Refugio Último]
No tienes que depender de que todo vaya bien para estar tranquila en tu presente. Algo que no se mueva frente al caos. Ese punto de apoyo, puede empezar dentro.

[Día 5 - Refugio Último]
Dejar que el peso baje, que el cuerpo se entregue al suelo. Enraizarse no empieza en la mente, empieza en el cuerpo. No es solo una metáfora bonita o visualización, va mucho más allá: Es un recordatorio de pertenencia.

[Día 6 - Refugio Último]
Cuando algo te duele o te asusta, se acorta tu respiración. Cuando algo te calma y estás abierta a recibir, se expande. La respiración es como un espejo silencioso del cuerpo. Prueba a sentarte con ella de forma especial.

[Día 7 - Refugio Último]
Una danza interna entre los latidos de tu corazón, tu respiración y tus emociones. La coherencia del corazón es la sincronización entre todas ellas. Una forma más de hacer sentir tu sistema nervioso en casa ♥️

[Día 8 - Refugio Último]
Sostener un espacio incondicional. Sin prisa. Sin juicio. Sin necesidad de cambiar nada. Leer y acompañar los microcambios en tu cuerpo, en el desarrollo de tu relación contigo te convertirte en la sismógrafa de tu alma.

[Día 9 - Refugio Último]
Un retorno profundo y amoroso a tu propio cuerpo, a tu refugio, a tu hogar. Una meditación integradora que te invita a detenerte, a dejar de buscar respuestas, y simplemente… volver. Volver a ese lugar donde todo comienza y termina: tu cuerpo, tu espacio seguro, tu casa interna.